Misteriosa, bohemia, mítica, eterna…sin lugar a dudas su magia no puede ser expresada en una sola palabra.
La ciudad de la luz posee un encanto que enamora, difícil de resistir…. de día, de noche o en cualquier época del año, recorrerla permite sentir la brisa de su rio, el ruido de sus calles, sus impactantes monumentos y la hermosura de su arquitectura
Disfrutar una larga charla, un buen café, una copa de vino y estremecerse contemplando el brillo de esta ciudad imperdible, que nos envuelve de tal manera que resulta imposible no enamorarse de ella.